La recuperación de la Bandera

 

La temporada 2010 se la podría clasificar como especial en muchos aspectos. Si consideramos la temporada usando el paralelismo con el curso académico, tendríamos que hablar con más propiedad de temporada 2009-2010. Por lo tanto, la temporada, consideramos siempre que empieza aproximadamente el mes de septiembre y acaba el mes de julio del año siguiente.
El mes de julio de 2009, se produjo un cambio de Presidente y de Junta Directiva. El Sr. Anastasi Codosal Jato pasaba el relevo al Sr. Albert Miquel Nogueras. La temporada se iniciaba con nuevo equipo al frente de la entidad. Pero esto no fue todo. El mes de octubre se hizo una reforma de los Estatutos para adaptarlos a la nueva normativa y el mes de noviembre se produjo la elección de nuevo Capitán Manaia, por la renuncia al cargo del Sr. Francesc Xavier Pelàez Sanfrancisco, elección que recayó en el Sr.. Jordi Romagosa Nebot. La Semana Santa del año 2010 vivió, pues, el traspaso de poder entre el Capitán saliente y el entrante, dentro de un acto que se llevó a cabo en el propio acto de Homenaje en la Ciudad del Jueves Santo. 

Presentación a la tropa de la Bandera recuperada (Foto: Mireia Romagosa)

Pero el hecho más inesperado por muchos Armats, sobre todo los más veteranos, se produjo el Viernes Santo. Toda la formación ya se encontraba concentrada en el patio de la prisión, cuando el presidente de los Armats se dirigió a todos los presentes y comunicó que había recibido la visita de una persona, de la cual se ha conservado el anonimato. Esta persona, que actuó únicamente como mediador, le hizo entrega de un paquete que contenía la antigua Bandera de los Armats.
Haciendo un poco de historia, nos encontramos que a raíz de la supresión de las procesiones en 1969, el material de los Armats quedó recogido en el Foment Mataroní. Unas obras de reforma del local pusieron en peligro el material que se guardaba, el cual estaba en cajas de cartón. El Sr. Lluís Rabassa se puso en contacto con el presidente, el Sr. Marcel·lí Llinàs, para avisarlo de que todo el material corría peligro de estropearse o de ser tirado a la basura. Fue entonces cuando por decisión del presidente y de un grupo de integrantes, el material se sacó del local y se guardó en casas particulares. Con todo este ajetreo, una parte del material se perdió, o bien antes, o durante o después. La cuestión fue que la Bandera fue uno de los elementos que desapareció. 

Aplausos tras la presentación de la Bandera recuperada (Foto: Mireia Romagosa)

Se entiende, por lo tanto, la emoción de los Armats más veteranos al ver recuperado un elemento bastante significativo de la entidad, que hacía más de 40 años que había desaparecido.
A pesar de todo, no queda sino dar las gracias a la persona o personas que tuvieron el detalle de conservarla y devolverla al lugar de donde no tendría que haber salido nunca.
Actualmente esta Bandera se encuentra expuesta en el Museo de la entidad.